mis amigos

19 de marzo de 2006

Palenque el final

Palenque

Enigmática y misteriosa

Lugar lleno de sorpresas

Pleno de religiosidad

Por los mayas construida

Grande entre las grandes

Días de gloria viviste

Conociste a grandes reyes

Guerreros dominantes

Pirámides majestuosas

De colores pintadas

Personas ataviadas

Con pieles engalanadas

Los Dioses y sacerdotes

Venerados por millares

De guerreros valientes

Y artesanos hábiles

Estoy seguro de una cosa

Que si quieren los dioses

Volver a verte esplendorosa

Antes que la muerte me recoja

Palenque el final

El resto de Palenque es igual de mágico y enigmático, en cada rincón encontramos cosas interesante que de inmediato cautivaron nuestras atención, los templos de la cruz, de la cruz foliada, el del sol y todos los demás (que por cierto no son pocos) perdidos entre la selva entre árboles grandes y añejos, dan al paseo un aire de misticismo que infunde respeto.

Nuestro peregrinar por entre las pirámides fue de sorpresa en sorpresa, subimos a cada una de las pirámides que nos era permitido, encontrando en la cúspide de cada una, gratas sorpresas; estelas hermosas y unas vistas increíbles del resto del conjunto piramidal. Fue increíble como la curiosidad pudo más que la fatiga ya que subimos incontables escalones, siempre encontramos detalles que comentar. La paz y la tranquilidad llenaban nuestros corazones y nuestro espirito, deseando quedarnos en Palenque para siempre.

Después de recorrer todo el conjunto mayor y de tomar incontables fotografías, continuamos el camino a la orilla de un pequeño arroyo de aguas cristalinas y cantarinas que se unían a los gritos de los monos y el trinar de bellas aves. Seguimos el camino que nos llevara a el museo de sitio, un camino lleno de grandes seibas (árbol sagrado de los Mayas, caminamos por un zacbe (camino blanco) parecido a los que los mayas construían como medios de comunicación y para trasladar sus mercaderías de un pueblo a otro.

Contentos y un poco sudados por el calor de la selva llegamos al museo de sitio, que guarda algunas piezas encontradas en las exploraciones arqueológicas, braseros y urnas funerarias entre otras bellezas. Muy cansados pero contentos llegamos a la cafetería donde saboreamos un rico café de cosechado en el estado; comentamos las experiencias, vimos algunas de las fotos que tomáramos en el recorrido, ya recobrado el aliento visitamos la tienda de artesanías y partimos con ganas de regresar algún día a hermoso lugar.

4 de marzo de 2006

Palenque la historia continua

Palenque la historia continua

Desde que lo veo, casi no puedo dejar de verlo, mis compañeros que lo ven por ves primera, soltaron un haaaaaaaa de admiración al ver la imponente majestuosidad de este conjunto piramidal; después de visitar la pirámide de la reina roja, del mismo color que la reina y sus húmedos pasillos, dirigimos gustosos nuestro pasos al palacio. Optamos entrar por un costado, donde un laberinto de pasillos y escalones nos lleva a un costado del observatorio (se cree que fue construido como observatorio astronómico).

Recorrer el palacio es una experiencia extraordinaria, tienes la sensación de estar en la presencia de reyes, sacerdotes y dignatarios elegantemente ataviados disfrutando de la vida palaciega; sus patios hundidos y sus estelas de grandes dimensiones, me trasladan a tiempos remotos del esplendor de esta ciudad Maya.

La pequeña estela de la coronación de Pakal en esas habitaciones a un costado del observatorio, sobrias pero dignas de tan poderoso rey; contrastan con el resto de los edificios; que ya no tiene el esplendor del color que recubría las paredes, coloreando las estelas de estuco con representaciones de reyes y Dioses, conmemorando fechas importantes que no podían dejar de ser registradas; de muebles de maderas finas y bellamente talladas pieles de Jaguares y plumas exóticas; frutas aromáticas y comidas exquisitas que terminaban de llenar el gran palacio de este en su tiempo pueblo que dominara reinos muchos kilómetros a la redonda.

El palacio es, en si, una zona arqueológica; plena del esplendor y detalles que todavía nos recuerdan su antigua decoración y la elegancia de sus tiempos de opulencia.

lo recorrimos sin prisa para llenar nuestras mentes con sus imágenes y a cada paso admirábamos a quienes con su trabajo y visión ce la belleza construyeron esta maravilla del mundo. Después de un rato abandonamos el palacio sin muchos ánimos pero impulsados por el deseo de ver lo que resta pero eso será en la próxima …….