Capitulo
4
Despertó sobresaltado no tenía idea del tiempo
transcurrido solo sintió que sus fuerzas se habían recuperado algo y subió de
nuevo con sus dioses y después de flagelarse de nuevo con la espina de maguey dejando caer su sangre en los últimos papeles
que le quedaban en su morral alimento con ellos y un poco de copal los braseros
coloco de nuevo chapopote todo lo que le quedaba el humo formo una densa capa
de humo en el techo de la caverna limpio del polvo las esculturas de las
deidades y derramo un poco de su sangre en sus rostros como ofrenda de
purificación y esperando pagar con ella su camino al paraíso esperado, coloco
también un pedazo de Jade en si pecho
para pagar al porteador del paraíso, de nuevo aromatizo con hierbas
acromáticas, cargo con su tea apagada para encenderla de nuevo en caso de ser
necesario.
Bajo con mucho
trabajo, la debilidad de su cuerpo y la falta de oxigeno le ocasiona mareo,
tiene que detenerse un rato respirar profundo para poder continuar está seguro
que su final no tarda mucho, saca fuerza de sus huesos viejos y cansados,
camina lento hasta la manta donde estuviesen los restos que acomodara junto a
los otros, toma la cobija la sacude y con cuidado se acomoda lo más cómodo
posible, agotado por tanto esfuerzo se cubre un poco con la manta de los lados,
cierra sus ojos lentamente.
De pronto los
recuerdos llegan como si hubiesen sucedido ayer, vio todos los rostros de los
familiares que partieron antes que él, y a todos los que dejo allá abajo en la
ciudad; recodó despacio toda su vida desde su niñez en el campo porque el
proviene de una familia de campesinos no tenía derecho a asistir a la escuela
por lo tanto todo lo que aprendió sobre la siembra fue a través de los mayores de la familia, en especial
su abuelo que siempre trató de prepararlo para la vida y para cuando llegase el
momento de la muerte.
Fue su abuela
quien le enseño casi todo sobre los dioses y las maneras de tenerlos contentos,
su padre le enseño sobre el calendario de cuando sembrar y cuando cosechar,
vino a su mente sus años mozos en los que se consolido como miembro de la
comunidad de agricultores después de haberse unido a la madre de sus hijos,
fueron años felices los vividos al lado de su mujer porque las lluvias so llegaron
siempre a tiempo y en ocasiones fueron tan abundantes que poco se salvo de las
cosechas.
Poco a poco
llego el sueño y tras él los dioses de la muerte lo tomaron en su regazo.
10 comentarios:
que bella novela amigo mío, buscó el lugar donde sabía debía irse al encuentro de sus ancestros. Sabio el abuelo, con paz tranquilidad y dignidad espero a la muerte teniendo en su mente a todos aquellos a los que amó. Te felicito Mario muy bonito lo que he leído. abrazos!!
Hola Mario.
Un gran valor y determinacion junto con una gran fuerza de voluntad le llevo a cumplir con su tradición de llegar al fin de su camino en su propia soledad, muy fuertes de espíritu en aquellos tiempos, hoy todo ha cambiado.
Muy interesante la historia.
Un abrazo.
Ambar.
Interesante historia, Mario. El abuelo sabía que había llegado su hora y la aceptó con valor siguiendo los pasos de sus antepasados.Un abrazo, amigo
Interesante esta entrada Felices Pascuas.
Saludos desde
Creatividad e imaginación fotos de José Ramón
Gracias Susy:
Celebro que te guste la historia
Hasta pronto Mario
Ambar:
La manera de vivir a cambiado y no pensamos hoy en día ni siquiera el la posibilidad de tal desenlace para nuestras vidas.
hasta pronto Mario
Juan:
Un gusto saludarte.
El abuelo fiel a la tradición se dirige en el momento adecuado a terminar su vida junto a sus dioses.
Hasta pronto Mario
Hola José Ramón:
Un gusto verte por aquí.
Mario
Me encantó Mario, no sé porqué no quedó mi anterior comentario aquí, pero quiero dar fé de que estuve ante esta novela o cuento corto que narra la fé y me repito de las personas que tienen creencias en sus ancestros , en su pasado. Y las fotos, ¡maravillosas amigo! Todo un gusto haber estado amigo, como siempre.
lyliam.
Se que has estado al tanto de la narración.
Gracias por estar Mario
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